Por: Edwin Rodríguez
Se dice que el perro es el mejor amigo del hombre, sin embargo, esta no es la opinión de quienes pretenden traficar estupefacientes a través de los aeropuertos, fronteras y puertos de Panamá.
A lo largo de la historia, Los perros son utilizados en diferentes tareas que van desde la detección de explosivos, lazarillos, en las terapias de personas con discapacidad, cacería, protección, ganadería, entre otras actividades.
La unidad canina de la Policía Nacional, tiene a su cargo el delicado entrenamiento de los canes que son utilizados en la detección de drogas en las fronteras, cárceles, terminales aéreas y portuarias a nivel nacional con resultados excelentes en el decomiso de drogas.
Según el instructor de la unidad Canina, que por razones de seguridad omitimos su nombre, “los canes comienzan su entrenamiento a una edad promedio de ocho meses. Para ello se basan en dos instintos básicos como son la preservación propia del animal y su reproducción; además, de cuatro impulsos primordiales, entre los cuales están: La caza, recobrar, olfateo y rastreo”.
Destacó que, “El valor, confianza y la dureza son características fundamentales para el desempeño de esta importante misión”. Aquellos perros que no reúnen los impulsos requeridos para la detección de explosivos y drogas, son utilizados en tareas de rescate, protección, exhibición, agilidad y destreza o simplemente para la reproducción.
El instructor, explicó que una vez completado su adiestramiento y alcance su madurez plena el can está preparado para trabajar con cualquiera unidad policial, siempre y cuando este haya tomado el curso en la ejecución de las órdenes y comandos para la obediencia del can.
El instructor canino, indicó que “los perros tienen un periodo de operatividad de siete a ocho años; una vez terminado su actividad en estos menesteres, estos, son ubicados en hogares sustitutos, en donde se aseguran que los canes tengan las atenciones y cuidados propios de la edad y sobre todo, el espacio para des estresarse”.
Fue categórico, en despejar los mitos que señalan que los canes padecen de trastornos relacionados con las drogas, pues “para su entrenamiento, se utilizan técnicas de adiestramiento para introducción de olores, esas técnicas se utilizan para las diferentes especialidades”. Ellos: ¡son seres vivientes! y los tratamos como tales, por tanto, el utilizar drogas auténticas significaría daños irreversibles al animal, inclusive, el contacto directo con las drogas podría causarle la muerte en el acto. Recalcó”.
‘todo se basa en el juego y recompensa: “encuentras el objetivo te doy un premio”. Los canes son entrenados en lapsos que varían entre quince y veinte minutos, preferiblemente en horas de la mañana y tarde, siempre contemplando los factores climáticos, que influyen en el desarrollo, estado físico y buena salud del perro.
Esta misma rutina, es seguida una vez están en el campo de trabajo, revisan de veinte a treinta minutos y descansan, para evitar el estrés del can. ¡Trabajan mucho! Dice el oficial de la canina, por consiguiente, La dieta es balanceada, consiste en: Vitaminas, carbohidratos y los minerales necesarios para el tipo de trabajo que desempeñan.
Una veterinaria idónea en esta especialidad, es quien se encarga de los programas de salud, nutrición y fumigación de los valiosos aliados de la seguridad del país.
Sobre las razas más comunes que se utilizan para este fin, agregó que están: Pastor belga y el labrador, sobresaliendo este ultimo por su docilidad y adaptación a los diferentes ambientes. Los mismos, son importados de Colombia, Perú y EEUU.
Por ser el Aeropuerto Internacional de Tocumen una terminal que opera las veinticuatro horas, la unidad canina, se mantiene siempre en su cumplimiento del deber, en el importante aeródromo con las debidas rotaciones de sus canes, que no dudan en advertir a su amo sobre la presencia de alguna sustancia extraña o explosivos en las maletas o cargas de los pasajeros que transitan a diario por esta terminal.
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