domingo, 10 de junio de 2012

Bahía de Panamá, Entre la Vida y la Muerte


Bahía de Panamá, Entre la Vida y la Muerte

Salvemos la Bahía de Panamá.
¿Sabes por que son importantes los Humedales?
¿Conoces la importancia de los manglares?

Por: Edwin Rodríguez

panatocumen@hotmail.com     /     Sígueme Twitter: @panatocumen



Según datos de Ramsar, la mitad de turistas internacionales visitan algún tipo de humedal, especialmente los marino costeros. No obstante, los humedales en todo el mundo son motivadores de diversas actividades turísticas y de recreación que deben ser valoradas como un servicio ambiental de gran importancia para la humanidad.




El reloj marcaba los primeros minutos del Veinte de Diciembre de 1989; Un bullicio de aviones F-117 Nightwak y helicópteros del tipo Blackhawk, Apache y Cobra, además de misiles y cañones de fuego rápido, surcaron los cielos esa madrugada en el corazón de Ciudad de Panamá.

 En efecto, La 82va División Aerotransportada del Ejército estadounidense, acompañada por más de 25.000 soldados de élite, llegaron de sorpresa a la capital panameña para acabar con el régimen del General Manuel Antonio Noriega. Washington denominó esta operación “causa justa”.

Recuerdo claramente la toma del cuartel de los pumas, la fuerza aérea panameña y el Aeropuerto de Tocumen. Fue rápida. Tal vez los cadetes y vecinos de Tocumen a esa hora, soñaban con las vacaciones y regalos de Navidad, mientras que en el aeropuerto, a esa hora, cientos de pasajeros se disponían al abordaje de un avión que los llevara a sus destinos.

La estela de destrozos que dejó el ataque, en la base militar fue considerable, lo que obligó, al ejército invasor tres días más tarde, a contratar personal de las áreas aledañas de Tocumen para la limpieza de las zonas y recuperación de los averiados paracaídas que cayeron en toda la periferia del aeropuerto y la bahía de Panamá.

En aquel entonces, fuimos  contratados junto a otras personas, para recuperar los paracaídas y las planchas de aluminio que fueron utilizados para lanzar desde los gigantescos aviones, los tanqueros, carros de combates y municiones que a su vez quedaron dispersos y atascados por los humedales y manglares en la bahía de Panamá.

Recorrimos metro a metro, por casi tres meses, los humedales, que confieso me eran desconocidos hasta ese momento.

En los patrullajes por la bahía de Panamá, nos encontramos con diversos ecosistemas que presentaban una gran biodiversidad, entre ellas especies animales de agua dulce y salada, invertebrados, quelonios y otros reptiles así como plantas hidrófilas.

Se podían ver por estas áreas además, los Patos, aves migratorias, garzas, cormoranes, fragatas, ibis, aves playeras y de manglar, palomas, pelícanos y flamencos. También se alcanzaban a divisar Anfibios tales como: Sapos, salamandras y ranas; además de todo tipo de insectos desde: Libélulas, mariposas y mantis; los Crustáceos no faltaban en los humedales: Los Cangrejos, cacerolita de mar, camarón, almejas, conchas negras, jaiba y diferentes tipos de Mangles que servían de refugio para las iguanas y otros animales que abundaban en el sitio.

Pero esta gran fauna y la riqueza natural que constituye los humedales de la bahía de Panamá, a lo largo  de estos veintitrés años, ha sido gravemente afectada y casi extinguida  por la intervención irresponsable   del hombre.

Probablemente, antes de la invasión a panamá  en 1989 o periodo de la dictadura, también se cometían transgresiones contra los recursos naturales y áreas protegidas.

No obstante, los abusos y el apetito devorador contra el ecosistema y zonas protegidas  parecen ser más evidentes en los últimos 23 años.

A diez años después de la invasión, la bahía de Panamá, sufre la primera intervención, con la construcción del Corredor Sur de 21km de largo, a cuatro carriles.
 Que se extiende por tierra y mar desde Tocumen hasta punta Paitilla atravesando la bahía  de Panamá.

En aquel momento, pese a la oposición de los ambientalistas muchos panameños permitimos que se cometiera toda esta barbarie  y tras tocamiento contra uno de los patrimonios naturales, que por su importancia y sus características excepcionales el Humedal Bahía de Panamá fue incluido en la lista de los más importantes de su tipo a nivel internacional en el año 2003.

El humedal de la bahía de Panamá, se extiende desde Costa del Este, en la capital, hasta el estero en Chimán.

Favorablemente, El humedal bahía de Panamá fue declarado área protegida en febrero de 2009 por la ANAM.
Sin embargo, el pasado 27 de abril  de 2012, La Sala Tercera de lo Contencioso Administrativo de la Corte Suprema de Justicia dejó sin efecto la Resolución AG-0072-2009, por medio de la cual se declaraba área protegida al humedal bahía de Panamá.

Sorprendentemente, al mismo tiempo, se anuncia la reducción de 300.000 a 40.000 dólares de las multas por destrucción de los manglares.

Lo cierto es que, La construcción de mega proyectos,    sumado a rellenos que se extienden sobre los humedales aumenta posiblemente la  vulnerabilidad y el riesgo a desastres de buena parte de la ciudad de Panamá, incluyendo  el aeropuerto de Tocumen.

Debido  a estos proyectos en la bahía de Panamá y la construcción del corredor sur.
La frecuencia e impacto de estas inundaciones se han incrementado en los  últimos 13 años en comunidades como: Tocumen, Cabras de Pacora, Juan Díaz, Parque Lefebre,  entre otros.

La bahía de Panamá, con su riqueza natural, su fauna y su flora, cada vez son más amenazadas y vulnerables ante la intervención del hombre y su mercantilización    indiscriminada.

Es importante saber que,  un humedal es una zona de la superficie terrestre que está temporal o permanentemente inundada, regulada por factores climáticos y en constante interrelación con los seres vivos que la habitan.

Por eso, la función principal del humedal, aparte de ser un gran ecosistema y un importante hábitat para muchos seres vivos, es que actúan como filtradores naturales de agua, esto se debe a que sus plantas hidrófitas, gracias a sus tejidos, almacenan y liberan agua, y de esta forma hacen un proceso de filtración.

El rol de la bahía de Panamá posee importancia internacional. Por ejemplo, los peces y aves no reconocen las fronteras nacionales y son capaces de migrar largas distancias. En consecuencia, la destrucción o degradación de los  humedales panameños puede tener impactos directos sobre los recursos biológicos de otros países.

Por su parte, los manglares sirven de hábitat y descanso para numerosas especies de aves migratorias y animales, en tanto   que proporcionan una protección natural contra la heroción de las zonas costeras, catástrofes del tipo de fuertes vientos, olas producidas por huracanes e incluso por maremotos.

Han pasado casi 23 años desde que las bombas comenzaron a caer de manera indiscriminada sobre la ciudad capital;   desde entonces   muchas cosas han cambiado, incluso   pensamos que seguirán cambiando en el ya malogrado ecosistema panameño, mientras sigamos con esa antipatía, desprecio    e indiferencia por  la naturaleza.

Con dolor  e impotencia, vemos como hoy se yerguen a las orillas de este importante corredor  costero, lujosos complejos residenciales, centros comerciales e impresionantes  rascacielos sobre áreas sensibles, mientras la bahía de Panamá una vez más, se sigue debatiendo entre la vida y la muerte.

¡Salvemos la Bahía de Panamá!


La Invasión a Panamá, sirve como punto de referencia para medir las afectaciones al ecosistema antes y después de la dictadura sin querer comparar que periodo es mejor o peor en materia ambiental.

 El humedal de la bahía de Panamá tiene una extensión de 85 mil 652 hectáreas, de las cuales 39 mil 691 corresponden a la superficie terrestre y 45 mil 960 son marinas.



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